La obra de teatro Máscara vs Cabellera
trae la lucha libre a la Casa del Lago
*Últimas funciones, hasta el 5 de octubre
**Obra del dramaturgo Víctor Hugo Rascón Banda
***Con la dirección de Erwin Veytia
“Mientras la justicia no aparezca ¡Lucha, lucha, lucha!”, gritan los actores al subir al escenario mientras comienzan a armar frente a la mirada expectante del público lo que parecerá ser un ring. Como un coro dionisiaco de un país pisoteado, sobrevive la aguerrida puesta en escena Máscara vs Cabellera, del fallecido dramaturgo Víctor Hugo Rascón Banda, ahora desde el foro al aire libre de Casa del Lago.
En esta adaptación realizada por Erwin Veytia, a cargo de la compañía teatral Al rescate, nos adentramos en el ya conocido universo mexicano de la corrupción (ese inasible mal cultural) pero ataviados dialécticamente bajo las tradicionales máscaras y capas de los luchadores mexicanos. La figura del luchador se ha instaurado como una estampa inconfundible en el imaginario social de nuestro país, según relata el director del montaje, por ello el reto de esta obra también fue transformar a los actores en luchadores. Y se logró.
México es un ring de luchas
La lucha libre y la lucha social se unen bajo una misma máscara. En esta interpretación de la pieza de Rascón Banda contemplamos la ascensión y caída del luchador-mesías, el sin igual Apolo. Seguimos los pasos de este misterioso paladín que intenta construir una nueva nación fuera del ring, organizando a sus compañeros para confrontar al sistema.
En este proceso lleno de quebradoras, martinetes y otros castigos, físicos y políticos, Apolo (Aldo Axel García) tendrá que enfrentarse contra la corrupción a todos los niveles, incluso contra la de la organización que lo protege. Al mismo tiempo, la búsqueda de una madre religiosa y la de una amante confundida, como en algún relato de film noir o alguna película de luchadores desconocida, se mezclarán en el sendero del héroe.
El halo de la traición se cernirá sobre el héroe de esta tragedia-deportivo-social para conducirnos hacia un noticiero de televisión (un final sin final), que no le resultará desconocido a ningún mexicano.
El montaje
“Cuando el país está en Estado de sitio, sólo existe un héroe de carne y hueso que puede ayudarnos”, gritan los personajes desde el ring-escenario, al tiempo que vuelan para impactarse contra los espectadores que se encuentran en las primeras bancas del coliseo-teatro.
La obra se constituye como una alegoría de la realidad mexicana explicada desde el impresionante combate grecorromano de los enmascarados de la arena; al mismo tiempo Máscara vs cabellera traza diversas líneas de tragedia amorosa, al estilo clásico, pero siempre con el giro inesperado del kitsch mexicano oculto bajo el antifaz.
Lo que vuelve a este montaje hipnótico y vibrante, diferente del teatro que estamos acostumbrados a ver, es que al final de la pieza ingresamos a un inesperado espectáculo de lucha libre, como el que se ofrece en las arenas de este deporte. Para quien nunca ha asistido a un evento de este tipo, la obra resultará en toda una experiencia. La puesta en escena también se enriquece con música en vivo, interpretada por los propios actores, una banda sonora que va desde un set de Dj hasta canciones populares, como “Gimme the power” de Molotov.
De igual modo, el realizador explicó que el ring con el que trabajan lo llevan a todos lados, lo cual consolida uno de los atractivos visuales más importantes de esta pieza: “Lo armamos y desarmamos como parte de un ritual, es parte de todo lo que intentamos expresar aquí. Nos exige compromiso a todos”, detalló.
Una obra desde el barrio
Según los involucrados, ha sido un camino duro el que ha recorrido la obra, desde la marginalidad de no recibir apoyo hasta poco a poco irse abriendo paso con el esfuerzo del equipo involucrado y el apoyo de la gente. Es un proyecto que les ha llevado un año y medio ir consolidando, comenta Veytia. El director y también actor de la pieza nos habló de los obstáculos y los alegrías que les ha traído montar y desmontar la obra, dentro del programa Teatro en tu barrio, a través de diversos escenarios populares de nuestra urbe capitalina, hasta llegar a aquí: “Donde que quiera que la montábamos la gente, aunque estuviera ocupada en otra cosa se acercaba a mirar, a disfrutar y a convivir. En las delegaciones se juntó buena banda. El chiste también consiste en presentar la obra donde sea, a pesar de que a veces no se tengan las condiciones”, expresó el director.
“Si todo México es una gran arena, entonces nosotros ¿por qué estamos luchando? Según yo la lucha está en el DNA de todos los mexicanos”, expresa el director. De igual modo, para cerrar la entrevista nos compartió que a una función especial, previa al estreno en el recinto universitario, asistieron famosos astros del cuadrilátero mexicano: “Nuestros padrinos los luchadores vinieron a vernos. Estuvieron con nosotros Octagón, Fuerza Guerrera, Tinieblas y nuestro maestro Orion. Él fue quien entrenó a los actores, fue quien le dio el acabado final al entrenamiento”, concluyó Veytia.
Máscara vs Cabellera es una pieza que dialoga muy bien con La amenaza roja, otra obra sobre teatro y lucha libre que recientemente se ha estado presentando en foros universitarios, porque de alguna manera el teatro es lucha y, como dijeran los personajes de la obra, la lucha sigue dentro y fuera del escenario.
Este proyecto es apoyado por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, Teatro UNAM e Incubadoras de Teatro UNAM. La obra llegó a Casa del lago con una temporada corta que inició el 12 de septiembre y que culminará el 5 de octubre. Los horarios son: Viernes 20:00 horas; sábados y domingos 19:00 horas. Los boletos tienen un costo de $150 y $100 con descuentos.