A partir de su investigación sobre la materialidad del sonido, Tania Candiani (Ciudad de México, 1974; vive y trabaja en Ciudad de México) ha desarrollado una vertiente en su trabajo que consiste en transformar artefactos y máquinas —reminiscentes de momentos tecnológicos pasados— en objetos sonoros. Más que un ejercicio nostálgico, se trata de una arqueología de los medios que, en palabras de la artista, se resiste a la noción de obsolescencia.